¿Olvidar el pasado?

POR: Estrellita de la Torre Lomelí

Yo me preguntó algo, ¿acaso el pasado se puede olvidar?; es más que obvio que NO, el pasado no se puede olvidar a menos que tengamos Alzheimer, o nos golpeemos la cabeza y perdamos la memoria o quizá la razón. Pero definitivamente creo la respuesta más factible, es que el pasado no lo podemos olvidar, por más que queramos, aunque nos aferremos por todos los medios de borrar algo que tal vez nos hizo daño pues es imposible hacerlo.

Difícilmente algo que vivimos en el transcurso de nuestras vidas, va a desaparecer de ella como por arte de magia (a menos que tengamos la varita mágica de Harry Potter, jajajaja….Qué creo imposible). Y es más que claro que si queremos olvidar algo, es por algún motivo e imagino que nada agradable para nosotros. Pero la verdad de las cosas es que jamás podremos arrancarla de nuestra memoria, de nuestra mente y corazón, siempre vivirá y será parte de nosotros y de nuestro vivir.

Pero lo mejor de todo este asunto de querer olvidar algo que pasamos, ya sea alguna mala experiencia, algún mal amor, alguna mala amistad, alguna decepción, algún mal trato, algún golpe, algún tropiezo, algún error, tristezas, llantos, heridas, corajes, frustraciones, desilusiones, mentiras o fracasos es que aprendemos de todo lo que ya hemos vivido.

El olvido es una herramienta eficaz que nos puede proporcionar el tiempo y de la cual no debemos prescindir, el buscar el olvido por obsesión o capricho nos lleva exactamente a todo lo contrario, no nos permite dejar en paz a la mente y nos empezamos a sentir algo frustrados, decepcionados e incluso hasta enojados; en cambio si nos permitimos darnos un tiempo y espacio a esos sucesos que queremos por todos los medios tratar de no volver a recordar y queremos dejar de lado y mejor le encontramos un sentido a todo ese cúmulo de experiencias ya sea malas o tal vez buenas, nos será permitido guardar en el desván de los recuerdos todo aquello que nos servirá en eventos futuros.

No nos neguemos a la oportunidad de vivir plenamente a nuestro ser, sólo vamos a permitirle que todo aquello que nos llevó al momento que estamos viviendo actualmente nos sirva para madurar y saber que “aquél veneno que no nos mata nos hace mucho más fuerte”, reza un dicho.

Recordemos que más que olvidar es aprender de todo el pasado para no cometer los mismos errores, la vida nos la oportunidad de aprender en base a ensayos, a errores y la experiencia nos va fortaleciendo en la medida en la que aprendemos a lidiar con todos esos momentos. Hay una frase que me encanta de Marco Tulio Cicerón y dice así: “quién desconozca u olvide su historia está condenado a vivirlo una vez más”.

Y la verdad de las cosas es que esta frase es totalmente cierta, quien olvide su historia, cada capítulo podrá volver a vivirlo, así que necesitamos aprender de todo lo que hicimos, nos hicieron y vivimos.

Hay que saber que el pasado es un momento de vida que ya no existe, que ya se fue, que ya dejamos de tenerlo y del cual no podemos cambiar nada, ni el más mínimo de los sucesos, sólo nos queda el guardar, el soltar, el perdonar, el permitir que nuestras vidas se llene con nuevas historias por contar, por nuevas experiencias que vivir.

La actitud que tengamos para que esto suceda es de suma importancia, porque si seguimos aferrados a un recuerdo no podremos jamás avanzar. Amigos recordemos que todo tiene un principio y un fin, es un ciclo ineludible en este proceso de vida, si permitimos que todo fluya será muchísimo más ligero nuestro camino y los cambios que debamos tener sucedan de manera natural.

No busquemos arrancar el pasado, dejemos que cada trago amargo pase por nuestra garganta por sí solo, no busquemos culpables, ni quien nos la va a pagar; no busquemos motivos para seguir guardando odios ni rencores; no busquemos quedarnos estancados en lo que hubo y ya no es; no busquemos pretextos para seguir sufriendo, sino razones para volver a sonreír.

Recuerden que vida sólo hay una, así que dejemos el pasado dónde está y sigamos abriéndonos paso en nuestro andar, que todo lo bueno estará por llegar.

Deja un comentario